martes, agosto 23, 2005


CHOCOLATE SUIZO

Ya ven por el post anterior de Manel que aquí todo puede ser cuestionado. ¿Todo? ¡No! En una aldea poblada por irreductibles galos...

En serio, que sí. Esto no es sólo "mi" blog. Yo lo he empezado, pero, como la Wikipedia, aquí todo el mundo que quiera participar y criticar y discutir y rectificar a otro, que participe: esto es la "casa de todos" (¡topicazo al canto!). Yo he echado carne al asador, en algunos casos con bastante picante, precisamente para eso, para que se piquen y entren al trapo. Pero ahora todos tienen, tenemos, la palabra.

Por volver al post de Manel, y darle una respuesta breve del menda, creo que GIVE ME LIBERTY es una obra muy menor, y en muchos aspectos, fallida. Vamos, que a mí tampoco. ELEKTRA LIVES AGAIN, en cambio, sí me parece cojonuda. Ya explicaré por qué lo pienso en un post futuro. Pero antes, tenemos que hablar de otras cosas que no sean Miller. Que, como ya dije aquí, esto no es un blog temático dedicado a él, ja, ja.

Y como no lo es, para demostrarlo volvamos al suizo Peeters, a examinar una de sus páginas, para ver por qué este tío es tan buen dibujante. Observen el trazo, el grafismo tan suelto. Tan denso cuando añade masas de negro (aclaro que añadir masas de negro suele ser algo difícil, y a muchos dibujantes les cuesta: a mí también). Yo ahí veo tres principales influencias:

- del francés Blutch, otra bestia parda del dibujo, ya hablaremos de él;
- de los también galos y también estupendos Dupuy y Berberian (en algunos trazos, en el modo de caricaturizar algunos rasgos de los personajes, y también en el estilo de planificar algunas viñetas, de forzar el encuadre);
- y, finalmente, del trazo brutalmente libre y suelto del neoyorquino Paul Pope, otro que tal baila: pedazo de dibujante.

Sin embargo, a pesar de esas influencias gráficas, lo que hace Peeters es único y personal: es Peeters, y es reconocible a la legua. Es una extraña mezcla del cómic europeo, con algunos rasgos de línea clara en el modo de caricaturizar, pero a eso añade la tradición del claroscuro, que es típicamente norteamericana: ya saben, la escuela que viene de Noel Sickles, Milton Caniff, Frank Robbins, Alex Toth, John Romita, Jordi Bernet, Horacio Altuna, David Mazzucchelli... y muchos otros. Así hasta sus versiones más recientes, como en parte es Paul Pope, que mezcla el claroscuro clásico con elementos del manga, sobre todo en su forma de planificar la página.

Pero a lo que íbamos: a la página de LUPUS, ambientada en la noche de Norad, el planeta donde transcurre la acción. Primera viñeta: plano medio del protagonista, Lupus. Miren cómo Peeters ha añadido trazos de negro por toda la viñeta, salvo en lo que le interesa destacar: el rostro del personaje. Su expresión. Peeters quiere transmitir desconcierto, incertidumbre e incluso cierto miedo leve de Lupus por lo que ha dicho en la página anterior la chica, Sanaa, que se mostraba insegura y llorosa, y advertía de la desgracia que trae a los demás. Por eso Peeters ha dibujado a ese tamaño a Lupus, y con todo ese "aire" a su alrededor. Fíjense también como Lupus parece mirar al lector, pero en realidad eso, cuando se acompaña luego con el contraplano de lo que está viendo (lo que se llama plano subjetivo), significa que mira a otra cosa, no al lector.

Segunda viñeta: contraplano para mostrarnos qué miraba Lupus. No es exactamente un plano subjetivo porque Peeters ha decidido mostrar de espaldas a Lupus, pero sí vemos qué miraba éste en la primera viñeta. Miraba a su amigo, que le devuelve una mirada parecida. Por cierto, que el conflicto/rivalidad entre ambos se empieza a anunciar (por la chica, claro, ¿qué creían?). Miren el tamaño al que dibuja al calvo barbas, y cuánto aire hay a su alrededor. Eso expresa cantidad de cosas.

Tercera viñeta: plano general bastante alejado de los personajes. Los sitúa a ambos en el escenario, y también nos los muestra pequeñitos, con ese montón de aire encima de ellos. Todo eso expresa ambiente y emociones, pero también tiempo. Una pausa tipo "ha pasado un ángel". Ya ven que no sólo se expresa tiempo en la acción con la anchura de viñeta (las tres primeras viñetas tienen la misma anchura), sino también por acumulación de acciones. Y de silencios en distintas viñetas. Silencio en primera viñeta+silencio en segunda viñeta+silencio en la tercera. Pero éste silencio de la tercera viñeta parece más "prolongado"... porque el plano más alejado evoca eso en nuestra mente.

Cuarta viñeta. El plano se ha acercado mucho. Vuelve a ser un plano medio en el que están todos los personajes. Observen lo listo que es Peeters para encuadrar: la chica ocupa el espacio principal de la viñeta, el barbas es el siguiente en jerarquía, porque él es quien la consuela... y de Lupus sólo vemos parte de su cabeza, de perfil. Eso expresa algo: Lupus está pasivo, pasmado, observando la acción pero sin participar en ella.

Quinta viñeta: encuadre forzadísimo, muy de cómic, un poco como Dupuy y Berberian en EL SEÑOR JEAN. Primerísimo primer plano de Lupus, expresa y enfatiza sus emociones, nos acerca a sus pensamientos. Miren qué expresión nos enseña Peeters sólo con su mirada. Ni siquiera ha dibujado la boca de Lupus. De nuevo, un uso del fuera de plano (su boca queda fuera del encuadre) para expresar emociones. Detrás de él, en la profundidad de campo, vemos al barbas que se aleja con Sanaa mientras nuestro prota se queda con ese careto de pasmado en primer plano. Por eso, entre otras razones, ha cortado con el encuadre el primerísimo primer plano de Lupus: para mostrar también a los que se marchan tras él.

Sexta viñeta: a todo el ancho de página. Expresa tiempo transcurrido, reposo, meditación. No por casualidad el texto de apoyo es largo, para evocar "tiempo" mientras Lupus tiene esos pensamientos... El dibujo, por cierto, es maravilloso también. Expresa cantidad de emociones, ya sólo con el dibujo. La luz, la postura encorvada de Lupus, las sombras...Peeters es tan bueno que, en esta viñeta, ni siquiera le hacía falta el texto de apoyo para expresar cosas. Es más: si no hubiera escrito nada, hubiera sido el lector quien hubiese llenado ese hueco, el de los pensamientos del personaje.

Ya ven, una verdadera página bombón. Y del mejor chocolate suizo.

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(imagen: página de LUPUS VOLUMEN 1, © Frederik Peeters, 2002; Astiberri, 2005)
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OTROS CÓMICS CITADOS
EL SEÑOR JEAN (Dupuy y Berberian, desde 1990; Norma)
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7 comentarios:

Anónimo dijo...

En la penultima viñeta a mí no sólo me sobra el texto de apoyo, es que me molesta de puro pretencioso.

Todo lo que dice ese texto es lo que dice el ojo tristón medio lloroso. Peeters tiene un claro problema de incontinencia, sabe lo que importa, porque mira al ojo cómo le da la importancia que merece, es casi tan grande como los dos 2 colegas de detrás, pero luego no se puede callar. Ya le pasaba en 'pildoras azules' y parece que va a más.

Ahora, para incontinencia patológica 'la marca amarilla', que será todo lo clasico que queráis, pero es que roza lo autoparódico.

Yo tal vez sea un lectorcillo de mierda y tal, pero tengo claro que un tebeo sin letras se puede hacer, pero sin dibujos no, así que las letritas deben aparecer para comunicar lo que los dibujos solos no pueden. No 'en lugar de' y menos aún repitiendolo. Esto en lenguaje lo llamaban redundancia, y era algo a evitar a toda costa.

Pepo Pérez dijo...

Pues yo no seré quien te diga que no tienes razón, OOOOO.

La redundancia entre dibujo y texto, diossss... es un buen tema. Ya lo analizaré en otro post, cuando tenga tiempo. Porque cuántos tebeos hay llenos de tales redundancias.

Afortunadamente, cada vez menos.

Gabriel C. dijo...

dos cosas, dos.

primero, felicitolo por su blog. excelente en múltiples (muchos aspectos como para enumerarlos)
segundo, ya que lo nombra. dedicaría un post al bueno de Pope y su obra?

con afecto, desde el otro lado del Atlántico.
su nuevo "fan", gabriel

Pepo Pérez dijo...

Tomo nota, Gabriel. POPE caerá por aquí, vaya que sí.
Pero poco a poco.
¿Desde dónde escribes, si puede saberse?
Muchas gracias por lo demás.

Anónimo dijo...

Mire, esta otra forma de representar el paso del tiempo, con sucesivos silencios, quizá por ser más obvia, sí que la había percibido yo como tal con anterioridad.

Por cierto, me ha dejado con la intriga de saber qué son todas esas cosas que expresa el tamaño del "calvo barbas" y el aire que lo rodea en la segunda viñeta. Que no digo yo que no expresen nada, ojo (no es tanta mi manía por llevar la contraria), pero ya digo, me ha dejado usted con la intriga, dejándolo así, en el aire, y me gustaría saber qué le sugieren.

Un saludo.

P.D.: Lo del trato de usted, cuando me muevo en la red, lleva siendo una costumbre mía demasiados años como para renunciar ya a ella. Pero vamos, que me puede tutear sin problemas, si así lo desea, no se preocupe.

Gabriel C. dijo...

le escribo desde el exótico (ja) Uruguay

Anónimo dijo...

Well, that could be true.