LOS MAYORES CRIMINALES DEL PLANETA

Parece que a Raymond Pettibon (Tucson, Arizona, 1957) no le gusta mucho la historia contemporánea de los Estados Unidos. A lo largo de su vida, ya desde su difícil juventud en Los Ángeles, ha comprobado "cómo la sociedad ha convertido en dioses a gente como J. F. Kennedy, Wilson y Roosevelt, gente que nos metió en la guerra de Vietnam y que ha actuado como los mayores criminales del planeta". Frente a esta conciencia homogénea de una nación empeñada en ensalzar a sus salvadores "cuando la realidad ha sido siempre otra", el artista opta por la reflexión crítica desde su obra. Ayer, Pettibon inauguró en el CAC Málaga una de las retrospectivas más importantes dedicadas a su trabajo de cuantas se han organizado en Europa. Hasta el 3 de diciembre, el público podrá comprobar el alcance de su compromiso.

Raymond Pettibon forma parte del "grupo de artistas controvertidos", según el comisario y director del CAC, Fernando Francés, que surgió en la Costa Oeste de Estados Unidos en los 70. Al mismo colectivo pertenecen Paul McCarthy y el recientemente fallecido Jason Rhoades, que ya han expuesto en el CAC, y Mike Kelly, quien, según anunció ayer Francés, lo hará el próximo año. Pettibon constituye un caso singular por su afiliación a la estética del cómic, su inspiración literaria y su recreación de los tópicos sobre el american way of life.

La exposición inaugurada ayer recoge 278 pinturas y dibujos realizados en los últimos diez años y dos videocreaciones de clara conexión con la obra gráfica, procedentes de galerías europeas y americanas y de centros como el Museo de Arte Moderno y el Museo Whitney de Nueva York. En ella se descubren estampas idílicas de sospechosa fractura, reproducciones de imágenes legendarias de personajes como Ernesto Ché Guevara y el citado JFK y textos insertados como recursos expresivos. "De mi afición a la lectura extraigo imágenes y palabras, me gusta incluir párrafos pero fuera de todo hilo narrativo, como sin pensarlo", apuntó Pettibon, que cita la Biblia, Joyce, Proust y Henry James entre sus referencias. Junto a la política y la literatura se atisban el sexo, el cine y la música: no en vano, el artista comenzó a trabajar a finales de los 70 ligado al movimiento punk californiano y diseñó portadas de discos para grupos como Sonic Youth y Black Flag.

"El artista que intenta controlarlo todo no funciona", aseguró ayer Pettibon. El tiempo y la historia le han dado la razón.

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Hoy, en MÁLAGA HOY, valga la redundancia. Artículo de Pablo Bujalance.