domingo, noviembre 20, 2005

EL CÓMIC SE ABRE PASO EN LOS MUSEOS

"El Museo de Arte Contemporáneo de Los Ángeles (MOCA) y el Hammer Museum de la Universidad de California los han ascendido a la categoría de Arte, con mayúsculas, a través de la exposición Maestros del cómic americano, abierta desde hoy y hasta el próximo 12 de marzo en Los Ángeles. (...) Es la primera vez que dos museos estadounidenses de arte contemporáneo se atreven a prestarle su espacio al cómic para trazar su historia desde un punto de vista puramente visual, al margen de sus contenidos temáticos o sociológicos y sin que medie la excusa de conectar esa forma artística con otras como el arte pop de los setenta. "Es la respuesta crítica a la exposición High and low: modern art and popular culture que organizó el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA) en 1990", declaró Brian Walker, uno de los comisarios de la exposición.

"A muchos nos indignó muchísimo lo que hizo el MOMA porque denigraba a los dibujantes al negarles el crédito por sus propias creaciones. Se limitaba a presentarlos sólo como mera inspiración de artistas consagrados como Lichtenstein, que utilizan otros formatos pero se sirven del cómic. Tanto Walker, que además de ser dibujante ha comisariado 65 exposiciones -"casi siempre en centros dedicados expresamente al cómic"-, como el propio Art Spiegelman, uno de los cuatro artistas vivos escogidos para una muestra de la que también ha sido consultor, buscan desde hace décadas el reconocimiento del mundo del arte hacia una forma de expresión que, según Walker, "está mucho mejor considerada en Europa que en Estados Unidos, y por eso esta exposición es un gran paso. El Louvre de París organizó una muestra dedicada al cómic americano en los años sesenta. Nosotros hemos tenido que esperar 40 años para poder hacerla". Winsor McCay, Lyonel Feininger, George Herriman, E. C. Segar, Frank King, Chester Gould, Milton Caniff, Charles M. Schulz, Will Eisner, Jack Kirby, Harvey Kurtzman, R. Crumb, Art Spiegelman, Gary Panter y Chris Ware son los creadores escogidos "tras mucho debatir y llegar a un consenso", según Walker, para esta exhaustiva exposición, que incluye más de 400 dibujos originales procedentes en su mayoría de colecciones privadas, revistas, páginas de periódico y bocetos reunidos por el autor, de forma que la muestra es, además, una detallada retrospectiva de cada uno de ellos.

"Estoy seguro de que recibiremos críticas por la selección, pero necesitábamos escoger, así que tratamos de centrarnos en aquellos artistas que cambiaron radicalmente el vocabulario del cómic, los que marcaron un antes y un después con su trabajo", explicaba Walker, quien ha trabajado en la organización de la muestra junto a John Carlin, un teórico y experto en el medio."

"(...) El cómic americano nació en los diarios hace más de 100 años. Publicados inicialmente en los suplementos dominicales, fueron ganando adeptos hasta convertirse en la principal fuente de entretenimiento de las primeras décadas del siglo XX. Winsor McCay fue uno de los pioneros del medio, y con él y su "Little Nemo in Slumberland" se abre la primera parte de Maestros del comic americano presentada en el Hammer Museum, donde se expone la obra de George Herriman, Lyonel Feininger, E. C. Segar (autor de Popeye) y otros cinco creadores cuyas innovaciones marcaron los primeros 40 años del siglo pasado. "En aquella época los dibujantes no eran conscientes de ser artistas. Se limitaban a dibujar para sobrevivir. Pero las nuevas generaciones, aunque su obra ocupe un espacio mucho más reducido dentro del mundo del ocio, sí son conscientes de ser artistas puesto que han crecido con museos del cómic, con libros y teóricos sobre el tema y se ven a sí mismos de forma diferente. Además, los artistas de otros campos también han aceptado el cómic como forma de arte, mucho antes que las instituciones oficiales",asegura Walker."
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Todo eso, y más, lo dicen hoy aquí.

¿Maldición o bendición? ¿El peligro que viene del Oeste? ¿hay que alegrarse? ¿O, por el contrario, hay que echarse a temblar porque el Arte Oficial amenaza con "contaminar" nuestro queridísimo cómic, ése que sólo sabemos entender y apreciar unos pocos connaiseurs?

¿Y qué tal les parece la selección de historietistas expuestos? ¿Y eso de que los historietistas actuales ya se vean a sí mismos como artistas?
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8 comentarios:

El Miope Muñoz dijo...

¿Maldición? Pues la verdad es que yo lo encuentro una auténtica bendición.

De la lista de seleccionados no tengo ningún "contra". Todos son grandes artistas. Ya va siendo hora de que el arte mayor incluya al cómic ("arte menor" ) como lo que es. Un medio fascinante que sabiamente combina imagen y texto.

Y espero que esto solo sea un preámbulo.

Un saludo!

Anónimo dijo...

Ahbrái que criticar las pretensiones de "trazar su historia desde un punto de vista puramente visual, al margen de sus contenidos temáticos o sociológicos".
La verdad es que parece que la exposición solo juzgue al comic desde un punto de vista estetico, olvidando el trabajo de los guionistas e invitando a "Mirar" un comic en lugar de "Leer" un comic.No me parece el mejor enfoque del medio.
A pesar de la critica, ojala tengan exito y empiezen a abundar actos similares.

Anónimo dijo...

Pues el listado, me parece incuestionable. Hombre, no puedo hablar de Feininger,de quien conozco las cuatro cosas típicas de La Hª de los Cómics de Toutain, pero es una buena mini-muestra (los que están, son, vamos).
Que los historietistas actuales se vean como artistas, pos mu bien, algunos, y otros no, casos habrá. Sobre todo, las aureolas al retrete. Verse como artista ¿qué es? Digo yo que no será verse mejor ni peor que un artesano, o un técnico, o un funcionario o un deportista... será, mejor, una forma de enfocar su curro, eso sí, y una forma distinta (no mejor, distinta) a como lo hace un artesano, por ejemplo.
Pero ¿qué implica de diferente "verse como artista"? Y ¿Es menos artista el comiquero que no reflexiona esas cosas que el que trabaja bajo discurso (pienso en un Moebius cienciaficcionero)?.

Pepo Pérez dijo...

bueno, verse como artista no tiene que ser peyorativo bajo mi punto de vista. Es simplemente reconocer el oficio que uno tiene. Antaño, los historietisas, todos lo sabemos, se veían sólo como currantes, lo cual no es malo sino todo lo contrario. Ahora bien, ¿qué tipo de currantes?

¿fontaneros, como dices tú?
¿funcionarios?
¿técnicos electricistas?

Pues no, su oficio era el de artistas, y más concretamente artistas del cómic. Porque saber lo que uno es en la vida es mucho más importante de lo que pensamos.

Sin que ser artista tenga connotaciones de "aureola" o superioridad ninguna respecto a los demás oficios, claro está. sin que ser artista no implique tener que trabajar como el que más. Que se lo digan a Kirby o a veinte mil más como él.

lo que quiero decir es que tan necesario como un fontanero o un electricista es un artista. Es lo que creo y puedo demostrarlo, aunque mucha gente piense que no es así.

Escritores, guionistas, actores, directores, pintores, escultores, fotógrafos, etc. etc.

Anónimo dijo...

Como decía antes, el problema es de construcción de significado.

Un Artista es alguien que hace Arte. El Arte sólo lo hacen los Privilegiados, dotados de un don de Genio. Luego los Artistas son unos Genios Privilegiados tocados por la diosa Fortuna.

Dado este silogismo, partamos de nuevo de la pregunta.

<<<¿Y eso de que los historietistas actuales ya se vean a sí mismos como artistas?>>>

Es un problema de forma. Durante tanto tiempo hemos escuchado en todas partes hablar de las estructuras de poder del mundo de la creación que acabamos acatándolas sin cuestionarlas. El arte o el Arte no es lo mismo. El arte es el que nos toca en lo más profundo ya sea intelectual o emotivamente, el que debería ser Arte; y el Arte es el que nos aseguran que es Arte, siéndolo en ocasiones escasas, y siendo más bien arte, y a veces ni siquiera eso. O sea, que entiendo como arte una sublimación de las experiencias colectivas que pone en funcionamiento un productor social ya sea electricista, guionista de cine, autor de historietas o artista conceptual. La función del creador como canalizador de su entorno creo que es necesaria para que este entorno reflexione sobre sí mismo sin tapujos ni cortapisa. Si lo hace un tipo a partir de sus cuadros o novelas o del modo en que atiende una mesa de un restaurante tanto da!

A mí me pasa que cuando enseño un comic, un cuadro o una foto, cada persona me dice lo que piensa, lo que siente, lo que considera,... Y curiosamente cada uno dice una cosa por completo diferente. Con el Arte no pasa eso. Extrañamente, todos estamos de acuerdo. Quizás no todos, pero con el tiempo, a fuerza de repetírnoslo y a riesgo de quedar como ignorantes o analfabetos, nos lo acabamos tragando. Cómo ocurre que la misma pintura para 10 personas distintas sea diez cosas y sin embargo que otra Pintura sea sólo una cosa para cientos de millones??

El Arte unifica criterios y gustos y por lo tanto genera corrientes de pensamiento unidireccionales. Luego, ese mismo Arte se encarga de ir dando saltos mortales para que parezca que siempre se está autocuestionando, pero en realidad acaba cayendo en un mismo punto. El punto muerto.

Creo que es Félix de Azúa el que habla de la muerte diaria del arte. Yo lo que creo es que al Arte habría que matarlo definitivamente para que el arte pudiera respirar un poquito.

Aunque supongo que a la larga, el arte acabaría convirtiéndose en Arte.

Y es que somos asina.

Un abrazo
Joan marín

PD. Y ya dados, por supuesto que me alegro de que por fin nos toque un pedacito del pastel. Ya está bien de ser los únicos escrupulosos que no se aprovechan del ridículo show business del Arte.

Anónimo dijo...

Hombre, yo en principio no veo mal que se centren en la componente plástica y estética de los cómics a la hora de organizar una exposición como esta, que para algo es eso, una de las componentes que el medio tiene, siempre y cuando, claro, no haga que se olviden por completo todas las demás de ahora en adelante, cada vez que el denominado "mundo exterior" pretenda acercarse al tema.

Un saludo.

Pepo Pérez dijo...

"El Arte unifica criterios y gustos y por lo tanto genera corrientes de pensamiento unidireccionales. Luego, ese mismo Arte se encarga de ir dando saltos mortales para que parezca que siempre se está autocuestionando, pero en realidad acaba cayendo en un mismo punto. El punto muerto."

Pero hombre, mójate!! ;-)
Ponnos ejemplos de eso que llamas Arte y que para ti, evidentemente, no lo es.

Anónimo dijo...

Salva War al habla.
Para mí, por encima de volver a hablar de arte, o Arte, lo que me interesa de este último post es que efectivamente es gratificante que al cómic se le dé el tratamiento de arte (o Arte), pero... claro, siempre hay un pero... ¿Queremos qué realmente se le dé ese tratamiento a un lenguaje que por encima de todo es un conjunto?
Porque claro, en la exposición solo habrán extractos de las obras de los artistas. Excepto en algunos de ellos (todos sabemos cuales, los de tiras cómicas o historietas de una página), del resto sólo se podrán ver originales que en realidad no fueron elaborados para ese formato: enmarcados y con un cristal, colgando de una pared iluminados por un foco en una galería de arte (o Arte, je, je). Luego, ¿qué sentido tiene el observar de pie un trozo de una historieta de Eisner o Kirby? ¿No sería igual que observar un trozo de un cuadro de Velázquez reproducido en una revista?
O quizás, de eso se trata precisamente... ¿Debemos apreciar la calidad de cada una de las partes para maravillarnos con el todo?
Que sí, que me encanta eso de ir a ver originales a los Museos (así con mayúsculas) de mis artistas favoritos, sobretodo porque creo que soy capaz de apreciar el trabajazo que tiene lo de contar una historia por medio de viñetas, pero... ¿Es ese el camino para que de una vez por todas se le dé el reconocimiento que merece al medio? ¿O se seguirá hablando del cómic como algo que pertenece a la subcultura pop y que por lo tanto hay que echarle un vistazo de vez en cuando para no perder el norte de lo que está en vanguardia?
Por poneros un ejemplo: El otro día estaba viendo una de las reposiciones que se están haciendo del programa “La Edad de Oro”, y estaba la Chamorro entrevistando a “El Hortelano”. Para quien no lo sepa, aclaro que este hombre fue uno de los dibujantes de cómics más famosos de los ochentas en la desaparecida revista “Madriz” y que después se hizo pintor famoso de los de galería. Pues, nuestra querida Paloma fue y le preguntó al tipo que cuál era su verdadero nombre, y este le respondió que un buen día decidió llamarse así porque de pequeño cuando tenía diez años estuvo muy enfermo y tuvo que guardar cama rigurosa, y que claro se hinchó de leer tebeos de superhéroes a través de sus ediciones de la editorial Vértice, y que a él le encantaba eso de los héroes que tenían nombres distintos a sus nombres originales y que cuando ejercían de héroes se llamasen “La Masa”, “La Cosa”, etc... (esos son exactamente los que él dijo, ¿eh?). Y claro, por eso él decidió un buen día dejar de ser Fulanito de Tal y pasó a llamarse “El Hortelano”. Seguidamente, la Paloma Chamorro le pregunta que si ahora que expone en Galerías y Museos va a volver algún día a dibujar cómics, y va el nota y dice (como renegando de sus orígenes, porque claro como el cómic no es arte): “No, no, yo nunca he sido dibujante de cómics. Yo hacía mis ilustraciones con texto y tal...”
Bueno, no sé si se me ha entendido el concepto o se me ha ido la olla un huevo...
Eso, que los que van de artistas al final acaban renegando de lo que les dió esa categoría de artistas y entonces...