NO CONSIDERABA QUE FUERAN HONORES MERECIDOS
En tu opinión, ¿en dónde reside la complejidad de Charles Schulz?
El hecho de que Carlitos fuera un personaje tan innovador me indujo a creer que había algo especial en ese caballero. Había disfrutado con MARY WORTH y LI´L ABNER de Al Capp, pero ninguna tira cómica antes de SNOOPY Y CARLITOS me había hecho sentir que los personajes me hablaban directamente. Siempre tuve la sensación de conocer y comprender a Carlitos y al resto de la banda de un modo que no me había ocurrido con los de otras tiras. Como había credido con la tira y había oído alguna vez por ahí que este tipo había pasado por una depresión, pensé: "tengo que conocerle", porque quería saber cómo conseguía llegar hasta esas cosas que están tan dentro de ti. Así que haber tenido la oportunidad de sentarme a charlar con Charles Schulz tanto delante como detrás de las cámaras fue una experiencia realmente extraordinaria.
¿Qué impresión te causó y qué recuerdos guardas de la conversación?
No te voy a decir de qué hablamos, pero sí que deseé haber dispuesto de más tiempo. Me hubiera gustado pasar mucho más tiempo con él, simplemente charlando. Para mí fue un hombre grande, realmente grande, pero que no tenía la más mínima idea del porqué de su grandeza. Y eso le molestaba. No sentía como suyos los honores que recibía, por la razón que fuera. No consideraba que fueran... merecidos. Además, me dio la impresión de que no se sentía especialmente en contacto con el mundo. Apreciaba de veras y estaba muy, muy agradecido por todas las cosas buenas que le pasaban, pero siempre me parecía que todo aquello le pillaba un poco por sorpresa.
(...)
¿Hasta qué punto percibías que SNOOPY Y CARLITOS era un tipo de tira diferente? Decías que te hablaba, así que, ¿hasta qué punto percibías esa dimensión existencial de la que carecen otras tiras?
Creo que cuando me convertí en adulta, porque surgió entonces una clase diferente de conciencia que iba desde el papel a la televisión. No había demasiados dibujos animados en ese momento. (...) Y claro, en los sesenta, cuando la tira empezó a tener realmente relevancia y transmitía cosas y tú pensabas: "Bueno, esto significaría esto otro, si fuera un adulto el que lo dijera".
(...)
¿Ves alguna afinidad concreta entre tu estilo de humor y el de Schulz?
En un sentido básico, sí, así lo creo. Él también era muy agudo a la hora de señalar la estupidez de las cosas. Me habría gustado que hubiéramos tenido la posibilidad de oírle hablar sobre nuestro presidente actual en más de un sentido.
Tiene gracia, ya que Sparky era algo conservador.
Nunca me ha dado esa impresión. (...) Es bastante interesante ver que no tienes la impresión de que toda la pandilla de Snoopy y Carlitos sea gente adinerada, ¿o no?
Siempre tuve la sensación de que la humanidad de Schulz superaba cualquier consideración política.
Totalmente de acuerdo.
-------------
Whoopi Goldberg, entrevistada en 2005 por Gary Groth, en el prólogo del tomo recopilatorio de SNOOPY Y CARLITOS (1959-1960), de Charles Schulz, publicado este mes en España.
1985:
Más Schulz en Con C: TE LO JURO POR SNOOPY
7 comentarios:
Las declaraciones de Goldberg me recuerdan al prólogo del Ideas Negras de Franquin publicado hace unos años por Dolmen. En él se hacía un retrato de Franquin como una persona dperesiva e infeliz con su trabajo. Y estamos hablando de Franquin: una de las figuras más importantes de la historia de la BD. Tal vez es este sentimiento de insatisfacción permanente el que les ha colocado donde hoy están. La feroz auotcrítica parece que les llevó a lo más alto del comic, a costa de sus salud mental.
pero schulz no parecía un tipo depresivo, no?
muy exigente, sí, pero bueno...
sí, claro que Schulz era un depresivo, lo he leído en varios sitios. Sparky se refugiaba en su trabajo porque el mundo le pesaba demasiado, es mi impresión cuando he leído textos biográficos sobre Schulz. Así estuvo, atado a la silla durante 50 años, a tira diaria.
Por cierto, milveinticinco, creo que procede sacar a colación a Franquin, al menos a este respecto. Sí, a mí me ha impresionado siempre que dejara de dibujar IDEAS NEGRAS porla depresión tan gorda que pilló.
Y ahí tenéis a nuestro Coll... Y a Wally Wood. Y Herriman nunca consideró que su trabajo fuese algo importante...
Muy buenas, buen verano! Vaya caña que habeis dado, sí señor.Aprovecho que estoy en una biblio para leeros y escribir un poco.Yo creo que Sparky sí sabía quuue era un artista,un poeta, y por ello elusivo,intuitivo y polisémico.Sabía que era grande,pero también que se le escapaba de entre el lapaiz gran parte de lo que quería decir.Y eso jode.También le hubiera gustado ser querido en el colegio, que es cuando importa.Me recuerda en esa modestia perfeccionista(que no falsa) a Ford.Yo es que creo que a los grandes artistas, cuando superan la adolescencia mental, se les queda cierta cara de pasmo.Y tal vez de tristeza e impotencia
qué pena me está entrando, joer... al menos schulz podía mirar la cuenta corriente de vez en cuando para animarse!
oye, y de los tomos recopilatorios de peanuts, ¿recomendais alguno en particular?
Publicar un comentario