viernes, febrero 24, 2006

LA "LÍNEA CLARA", ANTES Y AHORA

Mientras retorno a la rutina después de un viaje exótico e inesperado por motivos laborales -y un constipado de propina-, os dejo con Monolo, que se ha currado este comentario que, creo yo, se merece un post.
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Una idea que igual está fuera de lugar, pero que le dije al dueño que un día soltaría y que bueno, ahí va: aparte del tema narrativo, me entusiasma contemplar que la escuela Hergé está más viva que nunca también en su vertiente, digamos, de oficio, o metodológica, o como queráis llamarlo.

Al contrario, por cierto, de lo que pasó en el revival de la linea clara de los 80, donde un surtido grupo de autores europeos se lanzaron a homenajear el estilo de los maestros francobelgas (Swarte, Floch, Chaland entre los que tenían voz propia y eran, por lo tanto, más interesantes; otros, los puros copistas, Dick Briel, Dominique Hé y un largo etcétera, ya olvidados), donde los dibujantes se limitaron a dibujar "a la manera de" consiguiendo, en el mejor de los casos, recreaciones simpáticas de lo que sus maestros descubrieron. Más tarde algunos de ellos, básicamente Chaland, emplearía todo ese bagaje para ser el mismo (como dijo alguien por entonces, "dejar de ser referencia para convertirse él mismo en referencia"), pero la mayoría, una vez superado el efecto sorpresa, se fueron difuminando hasta confundirse con el paisaje. Qué bonita frase. Perdón.

De entrada, entonces, creo que sólo Tardi entendía el tema "línea clara" no como un referente estético sino como un método de trabajo: dibujar sintetizando a partir de la realidad, y aplicar ese grafismo en una narración donde la historia discurriera primando la legibilidad sobre cualquier otra cosa, buscando la modernidad en lo formal, recreándose en la documentación, huyendo del efecto gratuito, de lo apabullante y desmesurado: buscar una buena historia y contarla con una simplicidad perfecta, aunque ello implique un despliegue de recursos mayor que los aparentemente costosos claroscuros de gran intensidad dramática y las angulaciones de dinamismo non plus ultra tan del gusto de cientos ¡y hasta cienes! de astutos lectores.

Y todo ello de una forma personal, claro: en esto superaba Tardi a todos los demás. Es mi opinión y yo la comparto.

Es por ello que creo que la actual "nouvelle bande dessinée" (Blain, Guibert, Sfar y compañía, vaya) tiene muchísimo más de regreso a la linea clara que todo ese revival ochentero que antes mencionaba: el placer por sintetizar desde la realidad, la narración fluida, las historias densas, la personalidad. Ahí sí está el eco de Hergé. Ahí está, a mi entender, la línea clara, recuperada más allá del homenaje, asimilada por fin.

(En este sentido, anotar también que mi Tintín favorito de todos los tintines, que es EL LOTO AZUL (¡todos de rodillas!), no está tan lejos gráficamente de lo que en la actualidad nos parece modernísísimo...)

Y otra cosa es que en este texto soy consciente de que se arrojan varias simplificaciones más que discutibles... el espacio, las prisas... que os voy a decir... Y en fin, seguramente esto podría contarse con menos palabras. Lo siento: a los que os hayáis tragado el rollo y os parezca una perogrullada, pues nada: prometo mejorar.

Monolo.

3 comentarios:

Octavio B. (señor punch) dijo...

Ole Monolo! (por cierto, ¿es mi opinión y yo la comparto? se de quien dice así)
Sólo una idea para Pepo (cuando pase ese trancazo, cuando descanses del vieje ;).
Actualiza. Recopila, añade más de lo vertido sobre Tintín y Hergé: en tus comments hay cosas que merecen ser resaltadas, y en otros del post anterior.

¡¡¡¡hay que recordar al mundo por qué Hergé es grande!!!

Yo, que estoy vago y difuso, apunto una filia personal, tintinesca: ni Méliès, ni Kubrik, ni Space Cowboys gaitas: el cohete más bonito del mundo, el de Viaje a la Luna.
Ah, me río de verme tan bello, en este espejo

Pepo Pérez dijo...

bueno, gracias por el entusiasmo, Punch. A ver si más adelante ponemos alguna paginita de TINTÍN por aquí...

" ¿es mi opinión y yo la comparto? "

me supongo que es guiño a la coletilla final que siempre escribe Luis de Luis en sus comentarios en lacarceldepapel.

Anónimo dijo...

Lo que dice monolo es interesante, pero no lo comparto del todo. A mi modo de ver, línea clara no es sinónimo de simplicidad o sencillez, sino de legibilidad. Vamos, que lo que hacía Chaland era sin duda línea clara, pero no por sencillo precisamente, sino por claro. Pero si se trata de definir a sfar, blaim y autores así, yo los metería en otro saco, aunque blaim si tiene un poco de eso.