martes, noviembre 18, 2008

"SON IGUALES"

Reconozco que, del mismo modo que en el número anterior me quejaba de cómo el fandom está recibiendo, previo a su visionado, las primeras imágenes de la futura adaptación de The Spirit, me repugna el babeo generalizado ante los trailers y el puñado de carteles presentados de la futura Watchmen: es un proyecto insensato, con un origen absolutamente desalmado y unos objetivos que están muy lejos de querer rendir un homenaje sincero al material de partida. Pero Moore es más que Miller, aunque Moore reniegue de lo que los fans abrazan. Los caminos y las devociones del fandom, en cualquier caso, son inescrutables, y para comprobarlo no hay más que contemplar el éxito de El Caballero Oscuro o el asombroso caso del complot contra la adaptación a imagen real de Dragon Ball. Pero unos casos, francamente, son más inescrutables que otros.

En este caso, el fandom vibra con la muy singular idea de que Watchmen, la película, no vaya a aportar absolutamente nada a un comic que fue publicado en 1986. Es decir, estamos encantados con la oficialización del profundo complejo de inferioridad que el comic (y, por extensión, sus lectores) mantiene frente al cine, capaz aún de conseguir, con solo la aparición de una película con el nombre de Watchmen, que Watchmen al fin exista para la cultura oficial. Porque con ser uno de los tebeos clave de la historia del medio no era suficiente: necesitábamos la carta de legitimidad que conlleva la película.

Por eso el fan, escaldado por culpa de decepcionantes transvases entre medios, ya se conforma con que la película sea idéntica al tebeo, sea neutra, sea no-ofensiva. Con que no tengamos que echarnos las manos a la cabeza ya nos va bien, y por eso adoptamos una postura acrítica y dispersa, accesible para cualquiera, porque al fin y al cabo, cualquiera puede comparar una viñeta y un fotograma y decir “son iguales”. Y si son iguales, está bien.

Pero no está bien. Está peor que nunca.

------------------------------

--John Tones, en la sección A MACHETE de El Manglar 8, revista que llega este viernes a las librerías.



Más: John Tones en El Manglar 7, sobre THE SPIRIT:



------------------------------


Los eternos debates acerca de si es sensato el salto de franquicias de un medio a otro, sobre la traducción de lenguajes que sólo funcionan en los tebeos, o del deseo, en fin, de sacar pasta fácil y rápida de personajes y títulos que quizás tenían una única encarnación posible, vuelven a martillearme la cabeza cuando asisto al estreno del esperado teaser trailer de The Spirit, la película. Aunque el proyecto ha acabado en manos de un Frank Miller que debuta como director, The Spirit tiene una tortuosa historia como potencial protagonista de películas más o menos fieles a su encarnación original en los comics de Will Eisner de los años cuarenta.

Michael Uslan, por ejemplo, compró los derechos a principio de los noventa. Uslan, productor obsesionado con llevar diversos iconos superheroicos a la gran pantalla (en su filmografía se encuentra la producción de todas las películas de Batman de los últimos veinte años, así como, ahem, Catwoman y las dos películas de La Cosa del Pantano) barajó la idea de convertir a Spirit en un muerto viviente literal o dotarlo de superpoderes. En 2004 los derechos pasaron a manos Odd Lot Entertainment, que tras unos primeros pasos titubeantes (los primeros tratamientos del guión los llevó a cabo Jeph Loeb), acabaron proponiendo la adaptación a Frank Miller. Todo esto, como quien dice, con el cadáver de Eisner aún caliente: la propuesta le llegó a Miller en el homenaje a Eisner en Nueva York tras su muerte, y justo cuando la adaptación de Sin City estaba arrasando en todo el mundo. Tras unas dudas iniciales, Frank Miller decidió aceptar escribir y dirigirla. En el reparto, nombres tan conocidos como Samuel L. Jackson, Scarlett Johansson, Eva Mendes o ese orgullo nacional, Paz Vega.

Desde su misma concepción, The Spirit está condenada a la incomprensión militante y el escarnio previo a su visionado en blogs, foros y conversaciones varias. La decisión de Frank Miller de permanecer fiel tanto al espíritu (esa cosa intangible) como a la estética del comic (ya que no lo hará ni a su narrativa fragmentada ni, quizás, a su protagonista descentralizado) ya está haciendo arquear cejas entre quienes le consideran un dios caído. No es mi caso, aunque curiosamente por las razones opuestas a la mayoría de los detractores de este nuevo Miller: una reciente revisión del discutidísimo DK2 me produjo un agradecido colapso a causa del Síndrome de Stendhal, y las adaptaciones de Sin City y 300, sin embargo, me hicieron bostezar en sus mejores momentos, y mascullar de indignación entre dientes en los peores. Por desgracia, todo hace suponer que la película de The Spirit estará más cerca de la insultante mediocridad de las segundas que de la desafiante y militante iconoclastia del primero.

En cualquier caso, es de suponer que el autor de El Regreso del Señor de la Noche merece, a estas alturas y como mínimo, un voto de confianza. Voto que no está recibiendo por parte de la avalancha de fans que ladraron protestas en los comments y replys de rigor: “¡Que en los tebeos, Spirit no lleva gabardina!” (falso), “¡Que se pierde el colorido de los tebeos con este efecto Sin City!” (primero: como si no nos hubiéramos criado leyendo Spirit en blanco y negro; y segundo: está confirmado que la película tendrá una paleta cromática tan chillona que esos mismos fans se quejarán del exceso de color)... o la mejor queja de todas: “¡Que la gabardina de Spirit es azul!”. Como el pelo de Clark Kent.

No voy a hacer aquí de ángel de la guarda de una película que aún no se ha estrenado y que, en realidad, no me inspira mucha confianza. Pero desespera que el fan medio, aquel que sólo lee en diagonal para justificar sus lloriqueos, proteste, proteste y proteste porque sabe que ahora, a diferencia de lo que sucedía hace unos años, hay alguien que le escucha. Concretamente, el sonido del eco de su propia voz.



( nuevo trailer de WATCHMEN subtitulado en español)

32 comentarios:

Bruce dijo...

Pues a mí Miller ha ido interesándome poco a poco con los trailers..los 2 últimos me gustaron relativamente

Anónimo dijo...

Si, si y si.

No podría argumentarlo mejor, sería redundar.

Y si les "La Ciudad de Cristal" de Auster, es una cosa, muy buena, y el comic que hace Mazzuchelli es otra cosa, una adpatación, no una translación, y es muy buena, y es fiel al original, pero es MUY DISTINA, y es otro medio.

¿Por que la gente se alegra con las conversiones "pixel-perfect" de sus comics favoritos: flaco homenaje al comic, birria de pelicua.

¿Una pelicula sobre superhéroes de comics, donde este todo? "El Protegido". ¿Que comic adapta? Ninguno, claro. Es cine, homenajea al comic por comic, y al cine por cine.

Y cuando Moore habla sobre las adaptaciones de sus historias al cine tiene razón. Que me den el dinero, y punto.

Y aunque támpoco confío mucho en el Spirit de Miller, su enfoque es el acertado, es SU adaptación, aquello es el comic, esto es la pelicula, y son medios absolutmante distintos, coima ya!
El enfoque de Miller es el adecuado, luego él estará más o menos inspirado, más o menos dotado para la narrativa cinematográfica, pero esa ya es otra historia.

Y bueno si, DK2 es mucho mucho, pero es lo he pensado desde la primera vez que lo leí.

Miguel Valderrama dijo...

Por fin una critica seria sobre este tema! GRacias Pepo. Estoy de acuerdo en la mayoria, y era hora de hablar claramente y no lloriquear como quinceañeras que han destrozado su infancia, pero que en realidad llevan dos dias leyendo spirit.

DE siempre me ha gustado su blog, y ya era hora de comentar.jejej. Encima compartimos Málaga.Un saludo Boqueron!

Pepo Pérez dijo...

el texto no es mío, es de John Tones, dale a él las gracias. Saludos, igualmente.

An dijo...

Amen, :D

Anónimo dijo...

De acuerdo en lo del complejo de inferioridad respecto al cine. Y añadiría: paliza de Expectativa, de cultura de la expectativa, de emocionadas damiselas esperando que cruce la puerta el príncipe azul que va a traer felicidad, luz y alegría en orgasmo como premio debido a la devota admiración que le hemos profesado aun antes de conocer su rostro. Agh.

Está bien, por cierto, que haya alguien que atize viajes así. A veces hay demasiada complacencia.

Por atizar también: pese a los mimbres que usa -en eso, chapó para Miller-, DK2 se queda en menos de la mitad de lo que podía haber sido.

(javi)

Anónimo dijo...

En contra de la opinión general, el mérito que pueda tener la película de Snyder, si es que lo va a tener, no va a ser su fidelidad extrema, sino en lo que haya sabido eliminar del original. Siempre se ha dicho que el principal mérito de Robert Bolt, cuando adapta "Doctor Zhivago", está en todas las páginas y personajes de los que supo prescindir.

En cambio, por lo que hemos visto de The Spirit, su problema va a estar en donde es excesivamente fiel al original, aunque todo el mundo se está quejando de que no lo es. La pelea con Octopus en el clip de la película tiene el mismo estilo que la historieta "Bobo". En el comic es genial y en la película es vergonzante.

Luego está el tema de que somos un grupito de plañideras. Es cierto.

Poco valor intrinseco debe tener un tebeo para que se lo cargue una mala adaptación. Popeye ha sido el personaje más maltratado y desvirtuado de la historia y ahí está, el de Segar. Como que una serie infantiloide podría matarlo, ¡estaría bueno!

Anónimo dijo...

Bien, bueno, vale.

Yo es que no voy a verlas. ¿Y ustedes?

Anónimo dijo...

Los argumentos son un poco discutibles:

"el fandom vibra con la muy singular idea de que Watchmen, la película, no vaya a aportar absolutamente nada a un comic que fue publicado en 1986"

¿es necesario que le aporte algo?

"Porque con ser uno de los tebeos clave de la historia del medio no era suficiente: necesitábamos la carta de legitimidad que conlleva la película."

¿que a uno le guste ver en movimiento a personajes que le han hecho vibrar es buscar la legitimidad del comic?

En fin, no creo que por ver el Señor de los Anillos en cine, estuviera en realidad alegrándome porque se estaban legitimizando los libros.

Pero bueno, después cada uno disfrutará con lo que pueda de las películas de Spirit y Watchmen, aunque me consta que viendo 300 también se me hicieron pesadas y aburridas unas cuantas cosas.

Mikel dijo...

Yo sí que pienso verlas, sobre todo WATCHMEN: tengo mucha curiosidad por ver cómo van a trasladar al cine una historia como ésta, tan anclada al medio cómic en su técnica narrativa. En este caso, probablemente la excesiva fidelidad al original sería un error garrafal. Porque el cine y el cómic no son lo mismo, y ninguno es el hermano pobre del otro, cada uno tiene sus recursos, sus maneras de narrar, de narrar bien... y también mal: véase, por ejemplo, SIN CITY: un montón de planos juntos no hacen una película, señores Miller y Rodríguez...
Habrá que ver.

Pepo Pérez dijo...

"Yo es que no voy a verlas. ¿Y ustedes?"

Yo sí. Me gusta el cine, en general. No es que vaya a ver todas las adaptaciones al cómic que se hacen últimamente, pero estas dos me interesan y las veré. Espero además que me gusten, pero vaya, si luego no es así tampoco pasa nada.

Volviendo al debate que propone Tones, me parece que no es superfluo porque no está comentando las películas, que no hemos visto, está comentando el fenómeno de cómo están siendo recibidas (trailers, promoción, etc.) por los fans.

Mi opinión es que con Spirit se critica que "no es el Spirit de Miller" sino la visión de Miller del personaje. Sí, eso parece, aunque es verdad que algo de lo que hemos visto es bastante fiel al espíritu del tebeo (por ejemplo, la pelea cartoon que comentas, vm). Es lo que hacen los artistas, aportar su visión, para bien o para mal. Si es para una cosa o la otra lo sabremos cuando se estrene la película.

En cambio la opinión general (más o menos) sobre los trailers de Watchmen es aplaudir su "fidelidad". ¿Fidelidad? ¿A qué, al Watchmen de Moore y Gibbons? Porque esas imágenes, al menos las que yo veo, no son Watchmen el tebeo. Son épicas, muy estilizadas y molonas (quizás por eso la gente está encantada con ellas), pero así no era Watchmen ni esos son los personajes de Watchmen. De nuevo, es la versión de Zack Snyder, y es una versión épica hollywoodiense, post-300. Que luego nos convenza o no, que guste o no su versión de Watchmen, ya lo veremos cuando se estrene la película. Ahora, aplaudirlas porque son "fieles" al tebeo es lo que no entiendo, porque de fieles tienen bien poco más allá del parecido superficial con determinadas viñetas. El tono es otro, la "textura" es otra. Juzgo lo que veo en los trailers, eh?

Yo creo que Tones tiene razón cuando da a entender que las películas deberían aportar cosas nuevas al material que adaptan, que para eso son obras autónomas y con un lenguaje distinto. José Manuel puso el ejemplo (perfecto) de La ciudad de cristal de Karasik y Mazzucchelli, que parte de la obra de Auster pero, sin traicionarla, se convierte en otra cosa. En una obra autónoma, que aporta cosas nuevas al material de base, la mayoría logradas con el lenguaje del cómic. Por cierto, creo que tanto Sin City como 300 (las películas) aportaron cosas que no estaban en el material de base, en contra de lo que suele decirse. A veces para bien y a veces para mal. Que gusten o no las películas ya es asunto de cada uno.

Anónimo dijo...

A mi, de lo que he visto anticipado del Spirit de Miller me ha gustado la presencia del sexy, de una clara tensión erótica. Parece bien actualizado, estéticamente, respecto al original de Eisner, y uno de esos aspectos de la obra que uno tiene la sensación de que hubiesen sido pasados por alto o desvirtuados en una adaptación fanboy... Sobre el resultado final, ya veremos cuando lo veamos, pero ese punto, de partida, está bien.

(javi)

Mikel dijo...

Acertada reflexión, Pepo... reflexión, justo lo que no hace la gente que "babea" ante los tráilers y similares... Un poco de calma, por favor.
Desde luego, quien no quiera verlas, pues que no las vea, no pasa nada, pero luego, que no hable sin haberlas visto.
Y yo creo que es bueno que las películas (o cualquier tipo de versión) aportan cosas nuevas, al fin y al cabo son "versiones" (eso ocurría con XMEN y XMEN 2, para bien, opino)... otra cosa, en efecto, es ver si luego son buenas o malas.
Saludos a todos!

Anónimo dijo...

bueno, una cosa es X-men, de los cuales hay tropecientas mil historias; imposibles de contar en unas pocas películas...

A lo que hay que añadirle que han sido escritos y dibujados por cientos de artistas distintos, cada uno con una visión, con lo cual, las películas deben ser claramente una versión más.

Y otra cosa es una obra como Watchmen, cerrada y autoconclusiva con dos artistas concretos. Ahí la adaptación ya no tiene tanto margen de maniobra (al menos en principio)

Yo no digo que una adaptación deba ser una traslación literal de la obra, sólo me parece que es mejor respetar ciertas cosas (como la estructura del guión original) con la idea de no desvirtuar demasiado la obra.

si bien es cierto que sólo por recortar escenas para que la historia pueda ser contada en 2 horas ya se está dando una visión alterada.

Que se le aporten cosas a una obra al ser trasladada es algo inevitable, pero prefiero que el cambio sea estético a argumental.

No me gusta el aura cool que tiene lo que he visto, ni tampoco el exceso de cámara lenta (que Snyder demostró en 300 que no eran sólo cosa del trailer), pero prefiero que el director se limite a tocar eso, a que lo haga en el guión.

V de Vendetta también aportaba cosas a la obra original y bien a caldo que la pusieron.

Sea como sea, esperemos a verla.

Mikel dijo...

Buen comentario. Además, el recortar y/o alterar es algo que los profesionales del teatro llevan haciendo toda la vida en cada montaje de una obra, no tiene por qué ser necesariamente malo...
Coindido: habrá que verla.

Anónimo dijo...

Es que lo "chupao" es adaptar Watchmen en doce episodios de TV, como pedía alguno. En serio, eso lo hace cualquiera.

Hacerla en dos o tres horas es lo que tiene mérito. Pongo a David Lean por testigo de que es cierto.

Anónimo dijo...

Y si hay que poner ralentís, pues se ponen. A ver si el director no va a poder usar su estilo, nos guste este o no.

Anónimo dijo...

A mi me parece que las declaraciones provienen de un fundamentalista y por lo tanto se deben de entender como fruto de la rabia y la envidia que no como el fruto de una reflexión seria.
Su relevancia es además proporcional a la relevancia de quien las pronuncia; es decir pocquísima

Anónimo dijo...

Ja, ja... Si que es verdad que somos un coro de plañideras... Hay que esperar a verlas...
En lo que sí estoy de acuerdo con el texto es en la operación de marketing... Es repulsiva, cansa, agota...(en realidad, como todas). Tengo que hacer esfuerzos para desvincular el Watchmen de verdad de todo ese circo...
Y respecto a Spirit, si Miller le da el tono de Sin City, que me horrorizó, creo que la cagará. Claro que será su "visión" de una obra ajena ¿y qué? Yo siempre había imaginado Spirit en movimiento (hay veces que no es un ejercicio vano) como una mezcla de H. Hawks y el primer Kubrick...
Y, vm, cuando dices lo de Lean ¿te refieres a Lawrence de Arabia?

Alfred Holanda

Pepo Pérez dijo...

En el guión de Watchmen habrá cambios sustanciales respecto al tebeo, eso lo doy por seguro. Es inevitable, y no lo digo solo por lo obvio, porque en dos horas y media de metraje no hay tiempo para meter todas las escenas de Watchmen y se habrán eliminado un montón de ellas. Lo digo también porque la estructura de un tebeo (y más de una serie de 12 tebeos) es distinta a la estructura de una película. Las estrucutras argumentales de las películas son más simplificadas (y a veces también hay que alterar el orden de las escenas originales, etc.), lo cual no tiene por qué ser sinónimo de un producto "simple". Eso ya dependerá de otras cosas. De los diálogos concretos, de la caracterización de los personajes, de qué se elige para mostrar en pantalla y qué se elimina, de la realización general, montaje, etc. De ahí sale eso tan vago que es el "tono" de una película.

Lo de X Men (o Superman) es otro rollo, claro. Ahí no se adaptaba una historia concreta y cerrada, se adapta un universo y unos personajes. Es otro tipo de adaptación, con problemas distintos. Ahí la historia es más libre aunque tiene el problema de que debe "resumir" la esencia de los personajes y de un montón de historias distintas que ya se han contado sobre ellos.

Anónimo dijo...

Pues me refería, Alfred, a "Doctor Zhivago". En su día recibió palos por parte de la crítica literaria, en cuanto a que había traicionado el origen literario.

No he leído la novela pero, por lo que sé, es una obra en teoría imposible de adaptar, por su volumen y por la complejidad de su trama. De ahí el mérito que le dan a Robert Bolt, por haber obtenido un gran guión de un material tan problemático.

Al final la película es una obra maestra, ¿no?, que es lo que me importa como espectador.

Pepo Pérez dijo...

Desde luego. Y a lo mejor le salió una obra maestra PRECISAMENTE por apartarse del original todo lo que consideró necesario para hacer la película. Ahí hay otra cuestión interesante con las adaptaciones de tebeos, por qué esa obsesión con la "fidelidad" a la obra original. Si ya sabemos que va a ser otra cosa, que es una película, etc., a santo de qué tantos temores con lo que hagan o dejen de hacer en el cine. ¿Que pueden hacer creer al público general que el tebeo Watchmen es una obra más simple o más chusca (que no lo sé, habrá que ver la película y cómo es recibida)? Pero es que eso sucede día sí y día también con las adaptaciones literarias, y no pasa nada. Es más, el público suele dar por supuesto que la mayoría de adaptaciones son infieles, que el material base era otra cosa, y que a menudo era mejor. Es aquello de "bueno, el libro era mejor que la película..."

(otra cosa: he releído el hilo y cuando arriba dije "Mi opinión es que con Spirit se critica que "no es el Spirit de Miller" sino la visión de Miller del personaje. " quería decir "no es el Spirit de Eisner sino la visión de Miller del personaje")

Anónimo dijo...

Por eso decía más arriba que "en contra de la opinión general, el mérito que pueda tener la película de Snyder, si es que lo va a tener, no va a ser su fidelidad extrema, sino en lo que haya sabido eliminar del original"

Anónimo dijo...

A todo este compromiso entre la fidelidad estética que exige el fandom y la necesaria traición que supone el salto entre dos medios tan diferentes, le veo un problema añadido: Wachtmen, sin el genial artificio narrativo que le da cuerpo se queda en una historia aseadita, un polar donde buenos y malos se confunden, y poco más. Intentad sino resumir el argumento en tres o cuatro frases…

Por eso no creo que la película, como adaptación, pueda hacerle justicia al tebeo al nivel que mejor funciona Wachtmen. Podrá contar la misma historia que cuenta Wachtmen, pero no como lo hace Wachtmen ¿y eso que nos deja? Simple y llanamente la posibilidad de disfrutar de una película que pueda ser entretenida, e incluso buena, si sabe sacarle un buen partido al material de base.

Y eso nos lleva a lo que dice vm del Doctor Zhivago: la obra de Lean y la de Pasternak comparten título y alguna cosa más, pero no mucho más, y las dos son estupendas.

Anónimo dijo...

Cuando Jan Kounen le consultó a Giraud para la película de Blueberry, este último le dijo que hiciese lo que el creyese conveniente, que hiciese SU película.

Giraud ya ha dado su versión, la original, ahí está y nadie se la va a quitar. Me parece una postura razonable.

Podemos llorar porque la película era mala, pero ¿llorar porque "este no es Blueberry"? ¿Somos más papistas que el propio Giraud? ¿Somos tan tontos que nos creemos depositarios y protectores de la herencia de tal o cual autor?

A mi lo que me preocupa no es que Spirit sea fiel a la obra de Eisner, lo que me preocupa es pagar por una mala película.

...Y que un autor al que admiro tire por el retrete su prestigio. El Spirit de Eisner va a estar ahí siempre, para el que sepa y quiera buscar, por muy mala que pueda ser la película.

namuras dijo...

Bueno, bueno, interesante debate :)

A pesar de que comparto ciertas cosas que dice el tal Tones, me parece que parte de un prejuicio bastante visceral contra la adaptación de Watchmen que creo que le nubla un poco el juicio.

Como partícipe y a la vez espectador de excepción de todo lo que rodea la expectativa sobre Watchmen (para el que no me ubique, soy el editor de Peliculawatchmen.com y el gañán que ha subtitulado el trailer que tan amablemente Pepo enlaza -gracias, maestro-), no he presenciado en ningúm momento ese "babeo generalizado". Ciertamente, hay cierto nivel de entusiasmo entre una parte del fandom que se contrarresta a veces y matiza otras con el excepticismo, cuando no directo rechazo, de otra parte.

A veces el entusiasmo está asociado con la "similitud" (que no "igualdad", que esto no es Sin City y el que tenga ojos en la cara lo puede ver si duda) entre el material visual mostrado y el cómic, de igual modo que algunas veces también, los rechazos y críticas vienen por la falta de similitud en muchos aspectos. Pero no siempre los tiros van por ahí.
No es justo decir que Watchmen, la película, no aspira a aportar nada a la novela gráfica (tampoco es justo dedicarle epítetos como "insensato" o "desalmado" pero bueno...), ya que por una parte, Snyder ha declarado muchas veces que su intención es que la película sea a las películas de superhéroes lo que el cómic fue en su día a los cómics de superhéroes. Otra cosa es que lo consiga, para juzgar eso habrá que esperar aún unos meses, pero la intención está ahí. Por eso, detalles (tan criticados por otra parte) como el traje de Buho Nocturno. "Es que se parece a Batman", dicen algunos... toma, pues claro. El Buho del cómic se parecia al Batman de los cómics, y el de la película se parece al Batman de las películas.

Después, el tema de la trama. Se ha mantenido bastante fiel a la novela, y eso es bueno. Pero también se sabe que han cambiado cosas, como ciertos "detalles" del final (no es mi intención aquí destripar nada, aunque seguro que la mayoría sabe de qué hablo) o el acortamiento o aglutinamiento (según declaraciones de Dave Gibbons) de varias escenas para que cuenten lo mismo que en el cómic pero de forma distinta. De igual modo que el cambio en el final, si hemos de creer a Snyder, cambia la forma pero no el fondo de la historia. Osea, han cambiado la trama para adaptarla al formato, duración y sensibilidad del medio (el cine, me refiero) pero conservando la esencia de lo que se quiere contar.

Y puedo constatar, por los comentarios en blogs y foros (entre ellos los de mi web) que hay opiniones dentro del fandom para todos los gustos, incluso los hay que aplauden (a priori, claro) el cambio en el final.

Osea, que la película no es (ni pretende), un calco del cómic, y sí intenta ser una traslación al cine que mantenga la esencia de la historia original. Que después haya multitud de opiniones, a favor o en contra, más o menos documentadas o entusiastas es otra cosa. Es algo a lo que debemos acostumbrarnos en la era de la web 2.0. Ahora, me choca que este hombre critique el extremismo en las opiniones ajenas cuando el arranque de su artículo es de un integrismo alarmante. Tan malo es babear como vomitar, señor Tones.

Por último... ¿complot contra Dragon Ball? Osea, que cuando vemos que algo tiene toda la pinta de ser tan malo (y no digo ya como adaptación, sino como película en sí) expresar esa opinión es un complot. Me parece algo digno de alguien que piensa que su opinión (ya sea positiva o negativa) sobre algo es la única objetiva y valiosa, y que los demás o se equivocan, o son tontos, o malintencionados, o todo lo anterior.

Pepo Pérez dijo...

Es simple retórica, David. El texto de Tones que he copiado no es ningún comentario en un foro, ni siquiera un post de un blog, es un artículo impreso en revista. Tones usa el tono provocador, pues muy bien. A mí no me ofende, no estaba "hablando conmigo" ¨(ni con nadie en un particular) en un foro ni en un blog.

Anónimo dijo...

Estoy completamente de acuerdo con Papacairo: sin el artificio estructural Watchmen pierde la mayor parte de su encanto. Eso no quiere decir que Snyder vaya a hacer una historia sin interés. Repito, habrá que verla.
En cuanto a lo de las adaptaciones, creo que fue Hitchcock quien dijo que de un libro malo salen grandes películas y que de una obra maestra salen películas mediocres. Incluso en el caso de Pasternak/Lean. Aunque Nobel por medio, la novela no ha capeado los rigores del tiempo y la peli ha quedado para los anales... Una película no tiene por qué funcionar como lo hace su fuente. Que el resultado sea digno no depende de que lo haya sido la fuente. Creo que, por la relación inveterada entre cine y cómic, se tiende más a esperar fidelidad (a veces incluso a la hora de producir la película, como en Sin City) y eso puede ser parte de la decepción final.
Si Snyder consigue una buena película, cojonudo. Independientemente de la fidelidad al tebeo. Yo sólo espero que no sea otra peli más de supercapullos fashion contra el mal.

Anónimo dijo...

Se aplaude la originalidad de la vision de una obra de un medio al otro, como Shakespeare (basicamente obra escrita) a imagen (teatro, cine, historieta...)
Pero aqui se trata de un medio visual a otro tambien visual (entiendase imagen).

Ok, pues siempre y vale si rescata cosas escenciales de medio en cual fue creado; aun en un trailer de una pelicula te muestran si contiene drama y o humor, y el humor de Spirit no lo he visto en los trailers, cosa que proporsionaba mayor complejidad y respiro a la historieta,que para ver gente frunciendo el seño todo el rato esta 300.

santibilbo dijo...

"Estoy completamente de acuerdo con Papacairo: sin el artificio estructural Watchmen pierde la mayor parte de su encanto".
Hombre, Alfred, siempre está la magia del cine, esa cualidad tridimensional , de verosimilitud y de vitalidad que transmite como ninguna otra arte. Y la Silk Spectre esta está bastante más buena que la de GIBBONS,.Esa ya es una razón poderosa para ver la película.
Aunque estoy de acuerdo contigo, Alfred , con Papa Cairo y con todos los amantes del comic, de que buena parte de su potencia se sustancia en recursos propios de la historieta, no es menos cierto que el material conceptual de la historia es muy sólido( no así la trama, pero eso nunca ha sido importante para una buena película( ejemplos hay a patadas). El cine tiene multitud de recursos propios para trasladar la complejidad del cómic, sobre todo con el montaje.por lo demás Watcmen es muy cinematográfico en la retícula, los encuadres, el racord y hasta en ese dibujo tan detallista.
Yo es que creo que el Snyder es un tío con un cierto oficio y con cierto ojo para la planificación epatante mezclado con un estilismo de bellas artes. En fin, muy molón. PERO NO ESTÁ, CREO, A LA altura del proyecto. Para lidiar con una obra maestra tienes que ser tú también un maestro y tener algo que decir que no haya dicho ya el anterior. Si no sólo eres un parásito. Hasta ahora no me parece que Snyder haya hecho más que fuegos de artificio, que igual me equivoco y hace un peliculón. Que el genio también se entrena

Anónimo dijo...

A mi de todo esto, el fenómeno que me tiene interesado es el de la obra que se va haciendo con todo el aparato publicitario alrededor... No es nuevo, la primera vez que fui consciente de ello fue con Almodóvar, un genio de la autopromoción, y aquello me hizo caer en la cuenta de la extensión ya entonces de los making-of, pero me resulta muy interesante el punto hasta el que ha llegado hoy día. También en el proceso de elaboración de tebeos, eh, no es cuestión de presupuesto. Ni lo critico ni me pongo a favor, sólo lo observo con curiosidad, y me pregunto que cómo se puede mantener la concentración y no perder de vista los objetivos que se busquen con todo ese 'ruido' alrededor.

(javi)

John Tones dijo...

Me alegro de que mi articulito en El Manglar esté generando una conversación tan interesante. Me gustaría que quedara claro que me abstengo, como todos, de emitir una opinión en firme acerca de la película hasta verla: me parece lógico pensar que la película de Zack Snyder va a ser incapaz de respetar la complejísima estructura narrativa de Watchmen más allá de hacer un par de planos paralelos o secuencias-espejo. Pero son conjeturas: ojalá me equivoque. Lo que sí podía afirmar sin miedo a equivocarme, y creo que de eso va el texto, es de que los fans están encantados porque la película es idéntica estéticamente al tebeo. Más que nada, porque con un trailer es lo único que puedes ver. Y está claro que estéticamente es calcada. Y me parece una aproximación errónea a la hora de determinar la calidad de una película, si se parece mucho o poco a la fuente. ¿Que luego Snyder hace una película que respeta el muy complicado de traducir a otro medio subtexto del tebeo? Oye, pues mejor: tendremos una peli de superhéroes cojonuda. Pero creo que mi duda es razonable.

En cuanto a Dragon Ball, pues me temo que ves la paja ajena, la viga, todo eso. Dices: "Osea, que cuando vemos que algo tiene toda la pinta de ser tan malo (y no digo ya como adaptación, sino como película en sí) expresar esa opinión es un complot". Por complot me refiero a que los fans se han organizado en webs, foros y demás, y han hecho pública su intención de boicotear la película porque Piccolo NO ES DE COLOR VERDE. Agárrate los machos con el talifanatismo de baratillo. Tú ves clarísimo que Dragon Ball va a ser una chufa por el trailer (igual que a lo mejor yo lo veo en el de Watchmen, pero yo soy un poco más precavido), pero mira el dato al alcance de cualquiera que entre la IMDB: el productor de la película de Dragon Ball es Stephen Chow, posiblemente uno de los actores y productores de comedia más radicales, innovadores, iconoclastas y desconocidos de la actualidad. Con lo que también podemos tener derecho a tener esperanzas más allá del trailer, ¿no?

Pues a esa diferencia entre la reacción del fandom a Watchmen y la reacción a Dragon Ball, precisamente a esa es a la que me refería. A que cualquier reacción, en negativo y en positivo, es igualmente precipitada e injusta. ¿La diferencia? Que Watchmen usa la misma paleta de colores que el tebeo. Vamos, a tope.