domingo, octubre 02, 2005

CHRIS WARE: EPÍLOGO

Demos por finalizada la serie sobre Ware (de momento), recapitulando algunas de las mejores perlas cultivadas por nuestros comentaristas habituales. Sobre el efecto que provoca el "grafismo de manual de instrucciones" de Ware, elPablo dijo que:

"Creo que la clave está en el epílogo del recopilatorio de JIMMY CORRIGAN... decía el amigo que "todos estamos solos, y nos enamoramos para intentar escapar de esa irrefutable verdad". Creo que sus tebeos desnaturalizan tanto el entorno para hacernos ver eso. Que estamos solos, que no hay solución, que vivimos en un perpetuo manual de instrucciones en el que no hay salida, donde nuestra presencia humana es ínfima en el conjunto y sólo es importante para nosotros mismos. Es un hijoputa de cuidao, el Ware éste. ¡Pero no veas cómo dibuja!"

Sobre la integración entre texto y dibujo en Ware, un Usuario Anónimo dijo "Una de las preocupaciones de Ware (si no la preocupación fundamental), en contra de lo que parece a veces, es la articulación total de todos y cada uno de los elementos y signos que componen el lenguaje de la historieta en un todo armónico, cási "científicamente probado", y la mayor dificultad que encuentra en ello estriba en la conjunción de palabra escrita con dibujo y signos gráficos.

Hay que fijarse en el hecho de que el estilo de dibujo de Ware, en general, y en todos sus rasgos, es así: calculadamente concreto y austero, que sólo se separa en lo estrictamente necesario de la representación bidimensional con ciertos rasgos de estilo (la perspectiva, el color...) milimétricamente estudiados, para que no ensombrezcan el papel narrativo de la escritura y para que cualquier percepción gráfica de un elemento u otro de sus planchas sea captada y asumida de manera casi instantánea, justo como son captados los signos del lenguaje escrito por todo aquel que sabe leer."




O sea, la historieta como una caligrafía donde dibujo y texto, imagen y tipografía, se integren en un todo. Algo así ha afirmado el propio Ware que es lo que intenta hacer en sus tebeos.



Sobre el uso habitual de Ware de la perspectiva axonométrica, Álvaro Pons decía que "en la axonométrica hay un único punto de vista, el del observador. Ware ha optado por una perspectiva en la que el lector es el referente absoluto, tiene una visión global que no viene impedida por puntos de fuga. A eso hay que añadir que la axonométrica es la perspectiva tradicional de la realidad, no de la deformación de la caballera que, paradójicamente, es la que nuestra percepción está acostumbrada. Este doble juego genera en el lector una doble sensación: por un lado, es el "gran observador", el único dentro del tebeo. Por otro, la perspectiva que vemos nos es extraña. una suma de contrarios que resulta en un magnetismo indudable."


Sobre el mismo tema, Alfred dijo: "Con el uso constante de la axonométrica (y otros recursos que contribuyen a hacer de su narrativa una de las más frías, en apariencia, del medio) lo que termina provocando en el lector es un cierto distanciamiento con respecto a lo narrado, esa visión como de deidad lejana, hablando siempre, pienso, en este sentido.". Señor Punch añadía: "Ese frío gélido, distanciado, es otro gran logro en una obra de base confesional. Confesión vestida de cuento, pero confesión.Y de las crudas, pues no ofrece asideros al lector: ni con su narrativa, ni con su dibujo, ni con esas perspectivas, ni en las caracterizaciones (¿a alguien le cae bien algún personaje?). Así, el contraste entre la forma (pluscuamperfecta, fría) y el fondo (un grito con forma de parábola) marca más esta lectura que muchos slice of life que se publican."

CHRIS Y LA PINTURA

En estas estábamos, cuando Ángel Bernier, al hilo de la perspectiva axonométrica en Ware, sacó el tema de la pintura. "Al ocupar el autor una perspectiva propia de paisajistas, arquitectos y demases modeladores del entorno, creo que logra un efectos específicos: esa mirada de Dioses -que se mencionaba arriba- es también la mirada del -¿Gran?- Arquitecto lo que transforma la naturaleza de una historia confesional en algo cercano a un manual, algo que la connota como "manejable" (quizás falsamente manejable") o "ejemplar" (en el sentido de las novelas ejemplares... pero que en este caso los personajes pueden ser perfectamente unos contra-ejemplos)... Al pensar en esto recuerdo trabajos de Marcel Duchamp... que a golpe de vista son muy alejados de esto, pero que nacen con la noción de hacer un cruce entre la plástica clásica y los manuales de instrucciones de la modernidad industrial." Ajá. Duchamp. Enseguida volvemos sobre él.

Otro usuario anónimo añadía que "Ah!! Y es cierto: En Ware también hay muy presente un "maquinismo", aplicado en plan existencial, muy, muy de Duchamp, de EL GRAN VIDRIO, de Picabia y de los Dadá y los Futuristas... Hasta algunas de las portadas diseñadas por Ware están inspiradas en la estética de entreguerras (Si no recuerdo mal, la del número diez de la colección regular de ACME NOVELTY LIBRARY). Muy buena esa apreciación! (...) Ware tiene muy mucho que ver con todas las en ese contexto llaman "poéticas vanguardistas", etc, tan influidas por Duchamp y Beuys." Sobre esto, Mr. Punch añadía que "Ware puede, como dices, tomar del constructivismo, como McCay tomó del Modernismo... pero hay que hacerlo bien, hay que tener presente donde se juega. Esto es Narrativa Gráfica, y contaminarla es su privilegio, nacido de su propia esencia bastarda. Pero bastarda no es igual a impersonal."

¿Ein? ¿Ware y la pintura? ¡Pero si Ware no pinta sus tebeos! Su grafismo parece precisamente lo contrario a la pintura.... ¿o no? Miren esa portada de ACME NOVELTY LIBRARY, de Ware, que les he puesto ahí a la izquierda. Ahora vamos a echarle un vistazo a el GRAN VIDRIO, de Duchamp. Ahí lo tienen, justo debajo de esta frase.


Sobre Marcel Duchamp (1887-1968) y esta obra, extractamos de aquí :
"A tono con esa nueva corriente, Duchamp realiza en 1913 su primer ready-made, "Rueda de bicicleta", con el que inaugura la idea del objeto "estéticamente anestesiado". Paralelamente, sus tentativas pictóricas van tomando forma en la obra clave de su producción y, a la vez, una de las pocas imprescindibles para entender el arte moderno: La mariée mise a nu par ses célibataires, meme, también llamada el Gran Vidrio. Duchamp trabajó en ella desde 1915 hasta 1923, dándola entonces por "definitivamente inacabada". Con el Gran Vidrio -una pintura que empieza a dejar de serIo, pero también un mecanismo virtual- finaliza oficialmente su carrera como pintor, aunque en 1918 acaba Tu m' , una suerte de diorama anamórfico que resume los ready-mades hechos hasta entonces. Desde principios de los años veinte, Duchamp vive a caballo entre Nueva York y París. En la ciudad americana protagoniza iniciativas de inequívoco aire dadá como las revistas The Blind Man y Rongwrong, fundadas en 1917 y que no sobrepasan el segundo número, o New York Dada, publicada con Man Ray en 1921. De entonces data su alter ego Rrose Sélavy, que aparece por primera vez en la etiqueta del ready-made Belle Haleine, y la Société Anonyme Inc., creada en 1920 con Katherine Dreier y Man Ray para promover y organizar exposiciones de arte moderno."

Ahora comparemos algunas viñetas de Ware,





con algunos cuadros de cierto pintor del pop art:






¿Se parecen en algo, o es que yo estoy gilipollas?

Y, una vez que hayan respondido a esa pregunta... vuelvan al principio de este post y díganme si las tres primeras imágenes que les he colgado al principio (Corrigan sentado con la luz de la ventana, casas 1 y casas 2), o esta misma viñeta que les pongo ahí abajo para echar el cierre por hoy, les recuerdan, por temática y composición, a algún pintor norteamericano figurativo del siglo XX bastante famoso.


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4 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Qué tal Hooper?

Pepo Pérez dijo...

PREMIO!! Edward Hopper, claro que sí.
¿Verdad que recuerda mucho? No creo que sea casualidad.

Y el pintor del pop art cuyos tres cuadros he colgado ahí arriba es, por supuesto, Lichtenstein.

Ángel Bernier dijo...

Uf... por estar durmiendo (nuestra diferencia horaria) perdí el premio... Buenno, solo me queda retomar lo de M.D.:

La cercanía de Ware con el Gran Vidrio de Duchamp -y era justamente en esta obra en la que estaba pensando con mi comentario anterior - consistiría en que el Gran Vidrio "funciona" como una página de Ware de perspectiva axonométrica:

-Hay un componente que podemos asociar irónicamente a lo íntimo (lo confesional) trasvasijado en distanciamiento (manual): los mecanismos de la (frustrada) "posesión" erótica/intelectual (c.f. el título "largo" de la obra es: La Novia puesta al desnudo por sus Solteros, aún.) son deglosados en una puesta en escena experimentable por el espectador en 2 sentidos privilegiados:

A) el cuadro entero -algo similar a ciertas composiciones de página de Ware, donde realmente las viñetas se fusionan en un todo, cuidando de que la repetición de personajes o escenas no sean "ruidosas" en ese sentido (al contrario de las de las Gasoline Alley, de Frank King)

y B) la lectura del cuadro también es secuencial, emulando -¿inconcientemente?- una página de cómic... ¿y de dónde saco esa idea?, pues del mecanismo duchampeano de virtualizar el espacio de esa obra: los elementos del Gran Vidrio los podemos encontrar representados como obras particulares (o bien postulados como futuros agregados, de esta obra "definitivamente inacabada"), lo que hace que la obra en cuestión sea en la práctica un ensamblaje de partes (cada cual con un título propio: la novia, los solteros, el molino de chocolate, etc), cuya contigüidad da pie para hipótesis de lectura secuencial, direccionada. Esas partes con título propio, equivaldrían a las viñetas.

Pepo Pérez dijo...

perdiste más bien el "no-premio", Ángel ;-)

¿qué has estudiado tú? ¿Historia y Teoría del Arte, por ejemplo? Me voy a leer dos veces tu mensaje para asimilarlo completamente. Vaya nivel, macho. Gracias!!