viernes, mayo 09, 2008

ALL STAR


DOOMED PLANET.
DESPERATE SCIENTISTS.
LAST HOPE.
KINDLY COUPLE.

Así empieza ALL-STAR SUPERMAN. En una sola página, la primera, se cuenta el origen de Superman dando por supuesto que todo el mundo lo conoce, cosa que en un alto porcentaje de lectores resultará cierta. Un amigo me ha prestado la serie, que siguen realizando ahora mismo Grant Morrison y Frank Quitely (con Jamie Grant, tinta digital y color); yo estaba esperando a que la terminaran para pillarme el recopilatorio, pero en vista de que la cosa va lenta y necesitaba ponerme al día, se los he pedido. A lo que iba. Los dos primeros números me parecieron espectaculares, tanto por el ritmo (atrevidas elipsis entre viñeta y viñeta, una marca ya de fábrica en Morrison y su compadre Quitely; ambos parecen haber nacido el uno para el otro) como por el sense of wonder, inspirado directamente en la Edad de Plata de Superman. En realidad toda la serie es un reinterpretación bajo nuestros ojos de hoy de la fascinante mitología supermana de la Silver Age. El tercer episodio ya me gustó menos, aunque lo compensaba su abundante humor. En posteriores números la historia, que promete mucho al principio, se va desvaneciendo en favor de los homenajes cool en cada episodio a elementos concretos del Superman de la Edad de Plata:

episodio 1, planteamiento de la historia que introduce a toda pastilla, sin presentarlos, elementos básicos de la mitología del Hombre de Acero: Krypton y el origen de todo, el Superman que podía volar (o no) a través del Sol, el Lex Luthor sádico y científico-loco (no el empresario-cínico de los 80), el Daily Planet y Perry White, Lois Lane la periodista-sabelotodo, más algún elemento tardío sacado del JIMMY OLSEN de Kirby de los primeros setenta: el DNA Project, alias Proyecto Cadmus, alias aquí P.R.O.J.E.C.T, dirigido por el muy cool Dr. Quintum, cuyo vestuario parece sacado del armario del Dr. Who más hortera,

episodios 2 y 3, las maravillas que alberga la Fortaleza de la Soledad (la superllave para entrar en ella, la ciudad embotellada de Kandor, los robots supermanes, etc.), más la Superfamilia (Lois Lane, reina por un día, disfruta como Superwoman de los poderes de Superman durante 24 horas) y dos superhombres de la mitología antigua, Sansón y Atlas,

episodio 4, más Superfamilia con las extrañas aventuras de Jimmy Olsen y guiño fast forward a Doomsday,

episodio 5, el Lex Luthor inventor, con robots y un mono disfrazado de Superman incluidos, obsesionado más que nunca por su odio al Hombre de Acero; el Clark Kent más patoso que realmente parece alguien distinto a Superman,

episodio 6, viaje al pasado de Smallville, papá Kent y los Supermanes del futuro, Krypto el superperro,

episodios 7 y 8, Bizarro (y Zibarro) y su mundo, los efectos de los rayos del sol rojo sobre las margaritas, "do the wrong thing",

episodio 9, visitantes inesperados que también se salvaron de la destrucción de Krypton (y que llegan con planes algo distintos a los de Superman), la Zona Fantasma,

episodio 10, viaje a Kandor y otras maravillas; las Tierras paralelas y el Superman omnipotente capaz incluso de crear vida, Dios con capa roja y calzón por encima de las mallas.

Como cada vez soy más fan de la DC de la Silver Age, y Grant Morrison lo ha sido desde siempre (es un admirador confeso de las historias que escribieron en aquella época guionistas como John Broome o Gardner Fox), estaba predispuesto como lector a disfrutar esta serie. Morrison apuesta, como ya hizo en sus NUEVOS X-MEN, por la acción visual con diálogos alusivos y concisos al máximo mientras Quitely sigue haciendo un trabajo impresionante, no sólo por el dibujo en sí (sugiriendo la formas cada vez con menos líneas, cómo me gustan también esos espacios vacíos con los que a menudo compone viñetas y páginas) sino sobre todo por su original planificación. En este aspecto, no hay página en la que no haya algo singular y sorprendente: esos planos generalísimos tan alejados que utiliza de repente, ese mostrar las consecuencias de una acción desde un punto de vista raro, y además a veces sin habernos enseñado la acción previa que la causó; qué poco tiene que ver esto con la sensación del cine, cuánto se deja a la construcción en la mente del lector.

A pesar de todas esas virtudes, de las portadas con logo molón de Chip Kidd, y de que hay bastantes momentos donde la sensación de maravilla te deja pegado al asiento, la serie se me ha ido desinflando lentamente conforme la leía, posiblemente porque prima más el homenaje a los viejos tiempos de gloria de Superman que la historia en sí. Aunque ya veremos cómo acaba porque sigue en curso. Con todo, ALL-STAR SUPERMAN es el tebeo de superhéroes reciente que más he disfrutado últimamente, aunque sea solamente por el componente sensual de la sucesión de imágenes, al margen de la palabra, de lo que se narra. También es uno de los que mejor comprensión demuestra del legado superheroico clásico, en este caso el de la Edad de Plata, como debo haber repetido ya diez veces.


Un par de cosas a destacar para mi gusto: las elipsis tremendas que hay a veces entre viñeta y viñeta, por ejemplo en el episodio 7, el de la invasión de Bizarros, donde además hay varias secuencias con distintos personajes desarrollándose a la vez. La sensación que provoca, de una rapidez y confusión que aturden, me recuerdan un poco al DK2, o más bien, y puede que de ahí venga todo, a las exageradas elipsis que había en los tebeos de la Silver Age, sólo que eliminando el porrón de textos explicativos que había entonces y que aquí no hay (el efecto es brutal). Lo otro que me ha hecho bastante gracia es la metaviñeta final del episodio 10, un recurso ya típico en Morrison que además encaja como un guante en la tradición de "historias imaginarias" de Superman y de universos paralelos de DC.

10 comentarios:

Elisa McCausland dijo...

Es maravillosamente osado y entretenido. Este cómic es verdadera reinvención... Grant Morrison y Quitely nos quieran volver a dar la vuelta a una serie, como ya hicieran en New X Men; nos la traducen a los tiempos que corren... reinvención??? Loop generacional??? :)

Pepo Pérez dijo...

Sí, yo me pillaré el recopilatorio cuando salga, para qué negarlo.

Octavio B. (señor punch) dijo...

¿Y en general qué tal anda Morrison en DC hoy por hoy? Yo ni lo sigo, pero ya acumula Batman, los 7 Soldados aquellos... Vértigo aparte
(y a mí también es este Super el tebeo de capas que realmente me apetece, a priori... ahora un poquito más)

Anónimo dijo...

Pues los siete soldados (que a muchos no les gustó) está muy en la línea de Morrison. Un poco irregular por los cambios de dibujantes, pero muy gracioso y muy dramático, con muchos cambios de registro y con una historia globlal con muchísimas autoreferencias muy difíciles de pillar (más difíciles que las de Moore) pero muy hábiles porque no impiden disfrutar de la historia.

Su Batman también es bastante bueno (un pelín más lento de lo habitual en Morrison) y con otra vuelta a la Golden Age. Osea, alejando a Batman de la huella de Miller (que es genial, y para mí el Batman definitivo, pero que ya era hora que alguien lo hiciese porque batman se estaba convirtiendo en Rorschach).

Suscribo todo lo dicho por Pepo sobre All Star. Ya valorarán a Quitely con el tiempo. Ahore se le considera un dibujante de 8, pero en realidad es como tener a Moebius haciendo superhéroes.

Thalcave

Anónimo dijo...

Quitely es un dibujante que impresiona por cómo coloca los personajes y espacios. Lo que más disfruto son sus cambios de escenario y lo bien que se lee al mismo tiempo. Me da igual entre un ocho o un Moebius, pero si ponemos el ocho en horizontal, casi lo tenemos, Thalcave.

El Miope Muñoz dijo...

A mi me encantó aunque es cierto que a partir del cuarto número más que empeorar Morrison reduce el grado de ideas locas por número y eso sí que es una desmejora. Pero bueno tuve la mala idea de leerlo junto al All-Star Batman y eh....

Pepo Pérez dijo...

Ese es bastante malo, no? Yo no lo he leído pero eso dicen.

El Miope Muñoz dijo...

Pues no lo sé. Es Miller llevando al límite su idea de la parodia extrema o es simplemente malo, pero en todo caso es un chasco visto lo que se esperaba de All-Star de relanzar con guionistas de cierto lujazo.

Fox dijo...

Pues yo espero a los recopilatorios, pero los cinco primeros numeros si me los he leido y me parecen directamente lo mejor que he leido del personaje. Perfectos... especialmente esa obra maestra de número en que Superman lleva a lois Lane a la fortalez de la soledad.

Por mucho que se desinfle yo creo que es una serie imprescindible.

FOXXXXXXXXXXXX

Mikel dijo...

Quizá pierda algo de empuje a la mitad, pero me parece que vuleve a remontar hacia el final... y desde luego es de lo mejorcito que se puede leer, y que conste que Superman no es santo de mi devoción, precisamente. Quitely está TREMENDO, me encanta el arte de este hombre! Y el color, también muy bueno. Sobre "ese otro" All Star, el de Miller y Lee, me parece muy poca cosa. Miller citándose a sí mismo, y Lee algo más perezoso que en "Silencio" (sólo he leído cuatro números, quizá luego mejore...). Saludos a todos!